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“Abriendo las puertas para ir a jugar”

Desde mediados del 2013 el profesorado de Nivel Inicial, ha comenzado a poner en funcionamiento el “La Juegoteca del Normal 7”,  con los saberes y aportes de los estudiantes, de diferentes cátedras, articulándola con el Jardín de Infantes de nuestra Institución. Una juegoteca, se constituye como un espacio social, donde los niños,  niñas y adultos a través del juego, pueden compartir, divertirse, aprender, expresar su saberes, deseos y necesidades junto a otros.Sabemos que el juego, “libre”  o “el juego porque sí”, tiene escaso tiempo en la vida de los chicos y chicas. En algunos casos porque es usado sólo con los fines de aprender contenidos escolares; en otros porque el tiempo del juego se suplanta por el del trabajo; y en muchos casos porque es una actividad caracterizada como “poco productiva”.Sostenemos entonces, que crear un espacio donde el placer y la elección de los chicos y chicas sea lo que direcciona las prácticas e intervenciones de los adultos, puede aportar a promover y proteger uno de los derechos básicos de la infancia.Consideramos sumamente valioso tener una juegoteca  para que los estudiantes del Normal puedan idear, coordinar, sistematizar, reflexionar y producir saber sobre lo que sucede en ese espacio y en ese formato. Ponemos especial énfasis en esto último, porque la propuesta los desafía a implementar otros roles (ludotecario) y a la vez los invita a pensar cómo incluir el juego dentro de los jardines o escuelas primarias.Desde esta perspectiva, el espacio de juegoteca define un espacio de práctica que enriquece y potencia los procesos formativos de los alumnos y alumnas. Generar experiencias en las que las y los alumnos puedan “ponerse en situación de”, constituye un aporte sumamente potente para su futuro desempeño profesional. A su vez, constituye una modalidad apropiada para contribuir, desde la formación, a adquirir confianza en aspectos vinculados al ejercicio del trabajo docente. Es allí, en la propia entrada al territorio, en la observación y escucha inmediata de lo que acontece, donde emerge la posibilidad de revisar y reflexionar sobre las prácticas pedagógicas. Es allí, en el seno mismo de la acción, en el centro mismo del acontecer educativo, el lugar privilegiado para reflexionar, y construir conocimientos en relación al hacer educativo.Asimismo, pensamos este espacio como un dispositivo de intercambio y socialización con aquellos espacios educativos no escolares que los alumnos/as del Profesorado visitan a través de algunas instancias curriculares, como así también espacios educativos y recreativos presentes en el contexto comunitario y barrial de la institución. 
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